El niño de los ojos de agua era feliz haciendo relojes de arena. Él no usaba reloj porque decía que así se sentía más libre, pero no por ello ignoraba la importancia del tiempo. "Y es que al fin y al cabo, llevemos o no reloj, a todos nos acaba por afectar el tiempo", solía contestar. Por eso hacía relojes donde la arena caía en un suspiro y el tiempo pasaba rápido para olvidar desamores, y otros donde caía despacito, despacito, y hacía de los segundos horas para no perder detalle de los buenos momentos, de los momentos felices. De la dicha.
Pero si le hubieran preguntado, el niño de los ojos del agua hubiera dicho que quería ser pirata. Era feliz haciendo relojes de arena, pero soñaba con barcos.
Pero si le hubieran preguntado, el niño de los ojos del agua hubiera dicho que quería ser pirata. Era feliz haciendo relojes de arena, pero soñaba con barcos.
Foto: Barco pirata amarrado a la orilla del Mälaren.
Stockholm, noviembre 2007.
5 comentarios:
mmmmmmmmmm, relojes de arena, el tiempo, niños con los ojos de agua que quieren ser piratas y sueñan con barcos...me gustó la relación de conceptos....hace frío no? y te puedo asegurar como atenta vigilante que soy, que hay temporal. no es un buen dia para navegar.Yo te aviso cuando hayan condiciones para zarpar...
Jo preferisc també els rellotges d'arena. O de sol... así si es un dia nublado, el tiempo se descontrola, i per això tenim sensació d'estar perduts, raros... i si fa solet, tens molt clar com i en qui vols passar eixe temps.
Aunq en Suecia debe llover muxo, i los suecos deben llevar relojes de sol debajo de sus paraguas! Y así, hacer vida normal.
Ahir, parlant de tot un poc, me va tocar comprar-me un paraigües als xinos pa no morir ofegada... La comida de curro acabó a las 3.30... de la matinà!
:-)
el Capitán Garfio tenía un pánico atroz a los relojes :D pero a los de tic-tac, claro.
Peter, sin embargo, no temía a los relojes, ni a los piratas malos, ni a los cocodrilos. sólo tenía miedo de una cosa...
Hay veces que se podía parar el tiempo,no existir... detenerlo en esos momentos que uno quiere... y el de ayer podía haber sido uno de esos... Gracias por la sorpresa no sorpresa;-) y por estar siempre ahí... necesito tanto de esos abrazos... de esas risas... de bailar culito con culito como si estuvieramos solas en el mundo...
pa cuando un viaje a las estrellas????
Bibi, ya te explico como sigue el cuento...
Relojes de sol debajo de los paraguas... només podia ser la meva Roketa!
Tornem a la UJI i als cafenets furtius, ok?
Yo también tengo miedo, Barak. Igual me hago con uno d esos relojes d arena del niño d ojos d agua. Uno en el q la arena caiga despacito, despacito...
Viste q sorpresa-no-sorpresa tan estupenda? Anna y Nesi siempre a punto para dar abrazos :-)
A las estrellas no, neni. Nos quedamos por aquí q aun tenemos mucho q ver en la Tierra! Y ya sabes q lo d volar lo llevo regular... ;-p
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